sábado, 28 de diciembre de 2013

LOS ABORTISTAS ESTÁN QUE TRINAN.

Desde que Ruiz Gallardón anunciara la tramitación de la nueva Ley del Aborto los contrarios a la vida, los instalados permanentemente en la cultura de la muerte, los que defienden todos los derechos habidos y por haber menos los del no nacido, los que se mantienen en el poder sea como sea aunque cada vez nos amplíen la edad para jubilarnos porque estamos padeciendo un severo envejecimiento de la población que puede hacernos perder a España en unos pocos años decenas de miles de habitantes, mientras todo eso sucede, no lo olvidemos nunca que seres humanos formados en el vientre de la madre están siendo vilmente asesinados por culpa del aborto practica ésta que quieren mantener estos pseudoprogres de la izquierda radical, ¿Hay alguna que no lo sea?que están vociferando con los progres del Partido Popular.
 
Ya algunas "personalidades" públicas de este partido se están manifestando contrarios a la nueva reforma, prometida en programa electoral, comprometida, anunciada y mil veces retrasada, del aborto. Parece que a la alcaldesa de Zamora, a Núñez Feijóo así como a Cristina Cifuentes no ven con buenos ojos que no se sigan matando impunemente a tantos seres inocentes que nunca pidieron ser concebidos aunque si están pidiendo nacer que es un derecho que está recogido en la Constitución Española. ¡Son los Herodes del Siglo XXI!
 
Yo en las pasadas elecciones voté al PP en las elecciones generales, soy un voto suyo desde que cumplí la mayoría de edad, y los voté porque prometieron salvar a España de la ruina económica que nos metió los sucesivos gobiernos Zapateriles así porque la política social se asemejaba en parte a mis pensamientos políticos. Ahora, con el tiempo transcurrido, puedo decir que me siento defraudado, que ya no me representan y menos esos que se comprometieron cumplir el programa, que no olvidemos es el contrato entre el ciudadano y el partido, y ahora se oponen a él a cara partida.
 
Si tan disconformes están porque no abandonan los suculentos cargos públicos, del que cobran generosos estipendios, y se marchan a sus puñeteras casas. Se puede objetar lo que diga tu partido desde la militancia y no utilizando el marchamo del cargo o puesto que desarrolla. ¡Eso es una auténtica falta de vergüenza!
 
Sin quererlo los pro-abortistas del PP le están haciendo la campaña a la izquierda radical que tienen enfrente. Visto lo visto se puede decir que en estos momentos todos son iguales.
 
Rajoy ya ha anunciado que la ley puede sufrir cambios en la tramitación parlamentaria. Me imagino que estará prestando oído a esos que están gritando e imponiendo sus execrables posturas ante lo que piensa la mayoría de sus votantes incluido los democristianos entre los que me sitúo.
 
Si sucede lo que puede suceder y esta reforma se convierte en reformada por las propias "huestes" populares mi voto para las próximas elecciones europeas estará más que decidido y como intentarán quitarse del medio a todos los democristianos que tanto le afean y tanto daño hacen a esa imagen de acomplejados progresistas que defienden algunos pues mi voto y el de mi familia irá sin ninguna remisión al Partido Familia y Vida. Si somos muchos los que creemos que la Familia es el pilar básico de toda Sociedad, si somos muchos los que pensamos y defendemos que la Vida está por encima de cualquier derecho por muy importante que sea, si somos muchos los que pensamos que no todo es economía, que no todo es el progreso que estos nos quieren inculcar y que es un verdadero retroceso en todos los sentidos, entonces un partido como el Popular perderá decenas de miles votos que le dará otro tipo de quebradero de cabeza a su tranquilo y mesurado presidente.
 
Los abortistas están que trinan con la nueva ley del aborto y ahora con esta opinión personal lo van a estar más. Soy de los que pienso y pido la derogación total del aborto en España y sé que decirlo en público no es "políticamente correcto" aunque mirar hacia otro lado y conculcar tus propios principios, amigo, eso si que no vale la pena.
 
Jesús Rodríguez Arias

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