LAS RUEDAS DE PRENSA.

He asistido a muchas ruedas de prensa, en mi juventud incluso llegué a dar alguna, y siempre me han parecido una cosa de las más anecdóticas.

 

Las hay que antes de realizarla se consensuan las preguntas a realizar, es decir, se coartan la libertad, las hay que solo el interlocutor hace uso de la palabra negando a los periodistas de cualquier intervención, las cuales considero acomplejadas y llenas de temor, las hay por videoconferencias, las hay libres donde todos preguntan y los convocantes responden.

 

Cuando se convoca una rueda de prensa se suele comunicar a los Medios de Comunicación aunque he vivido ocasiones que entre los dignos periodistas encallecidos de trabajar en el medio y en la calle para recoger o investigar una noticia están los "pseudoperiodistas" que se creen que lo son porque tienen un determinado portal donde se informa de tal o cual tema. La responsabilidad de su asistencia no es suya sino de los convocantes que los invitan y los igualan a los profesionales del periodismo, denigrando a estos con tal comparación.

 

Hablando de estos medios que no son Medios de Comunicación Social puedo decir porque conozco algunos que se creen que están por encima del bien y del mal y aprovechan cualquier circunstancia para pisotear y menospreciar a los que dedican a la honorable y trabajada profesión del periodismo.

 

Lo malo es que hay muchas instituciones, que parecen que les deben algo, que siempre los tienen en cuenta y son merecedores de halagos o incluso se le agradece su trabajo en un acto conjunto donde se reúnen con todos los Medios de Comunicación haciendo tabla rasa y poniendo en el mismo rasero a todos. Esto es una auténtica falta de respeto a los Medios de Comunicación y a los periodistas.

 

Cuando todos aprendamos qué lugar debemos ocupar en esta vida creo que todo nos irá un poco mejor.

 

Jesús Rodríguez Arias