Cual una mala "cofradía" laica se muestran los independentistas catalanes con su hermano de Mas categoría al frente.
Desde todos los poderes del mundo les están diciendo por activa y por pasiva a los descerebrados hijos de la estelada que si Cataluña se independiza de España no tienen que hacer en el mundo, es decir que se quedan sin ningún instrumento que tocar en la gran orquesta que conforman todas las instituciones macro políticas, económicas, sociales...
Pero ellos erre que erre o más que más.
Ahora han prometido, un segundo sí y otro también, que el próximo 9 de Noviembre, que es como se llama el 9-N, "sacar las urnas a la calle". ¡Cómo si de una procesión, eso sí laica, se tratara!
Jajajaja. ¡Qué memos!
Rajoy y su gobierno demuestran firmeza en palabras y gestos de que la consulta independentista no se va a llevar a cabo y menos la independencia. Nuestro Rey y nuestro Príncipe, un día sí y otro también, defienden la potencialidad de una Cataluña dentro del Reino y del territorio de España, los empresarios de esa bella tierra y rica tierra defienden la unidad de España porque si no ellos y sus empresas abandonaran este territorio o lo que es lo mismo: Acabarán de hundir más en la miseria a los pobres ciudadanos gobernados por una iluminada y desastrosa casta política que "pa to sus castas".
Y mientras todos estos vaticinios se van haciendo más firme los independentistas de Mas, Pujol, Junqueras, Tardá a lo suyo, a programar el itinerario, a contratar las bandas porque el 9 de noviembre van a sacar las urnas a la calle aunque lo mejor que le puede pasar es que se recojan antes de tiempo y estos "cerebritos" acaben donde deben: En la puta calle o mejor entre rejas.
Jesús Rodríguez Arias
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