Los asquerosos y repugnantes asesinos de ETA tienen un comité de "verificadores", llámese al sujeto de nulo prestigio personal y profesional que pone la mano para decir cuantas sandeces hagan falta, para que demuestren ante la opinión internacional que ellos son muy "buenos", que no tienen intención de matar y extorsionar, que devuelven armas, aunque tengan fortines llenos de las mismas, y que han dejado de ser unos auténticos hijos de puta.
Este comité se ha reunido con estas ratas sarnosas para comprobar "in situ" que el proceso de paz va bien, que estos buenos chicos encapuchados son de fiar y que se merecen toda clase de privilegios por parte del gobierno español.
Por eso los socialistas vascos y navarros se llevan tan bien con los etarras de Bildu porque son gentes de fiar al igual que ellos. Los "sociatas" navarros son capaces de pactar con el mismo diablo, lo han hecho en realidad, con tal de que no gobiernen los democristianos de centro derecha de UPN y de Pachi López mejor me voy a callar. ¡Qué desastre! Con este tipo que se quiere postular para suceder a la momia de Rubalcaba no es de extrañar absolutamente nada. ¡Por sus hechos los conoceréis!
El otro día los etarras que están sentados en el congreso de los diputados hicieron su particular pantomima llegando incluso a dar una carta a la vicepresidenta del gobierno. Por esta rocambolesca situación ha sonado más la notable exclamación del Presidente de la Cámara Baja que el mismo paripé de los amigo de los terroristas. ¡Tíralo, coño, tíralo!
Mientras los amigos de los terroristas estén en las instituciones habrá siempre un déficit democrático porque están llenando sus arcas, que son las de los terroristas, con dinero de todos hasta de los que han sido asesinados o son víctimas del terrorismo.
Mientras los "verificadores" valoran los esfuerzos de estos chicarrones en el proceso de paz hecho a su imagen y semejanza, comen, beben y se dan la vida padre y cobran unos buenos dineros pronunciando en voz alta un dictamen dictado por unos asesinos cobardes y unos verdaderos hijos de puta que no son capaces de dar la cara sino que se la cubren para no ser reconocidos. ¡Cobardes!
Este comité de "verificadores" son como el maestro Liendre porque de nada saben y de todo entienden.
Jesús Rodríguez Arias
Mañana escribiré un post sobre la sultana Susana y sus pretensiones de expropiar la Catedral de Córdoba por la Junta de Andalucía.
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