jueves, 19 de febrero de 2015

MAQUILLANDO EL ABORTO.

Resultado de imagen de aborto no


En verdad lo que deberían dedicarse las eminentes señorías que gobiernan a España es la cuidada arte del maquillaje porque es lo que llevan haciendo desde que ganaron las elecciones allá a finales del 2011.

El programa que presentó D. Mariano al refrendo de los españoles y que fue mayoritariamente votado: ¡Maquillaje!

La crisis se ha solventado gracias al sacrificio de las clases medias y trabajadoras que han sido literalmente sacrificadas mientras los ricos lo son aún más que antes. Los españoles hemos salvado a España y no el gobierno que también en este asunto ha llevado una política de maquillaje.

La ingeniería social impuesta por el gobierno masón de Zapatero se mantiene igual que con él. ¡Por algo será!

La corrupción ha anidado en las entrañas de todos los partidos hasta de esos que se autoproclaman salvadores de la casta aunque ellos lo sean aún más de lo mismo aunque con otro gestos, mensajes vacíos, intenciones muy peligrosas y alma empozoñada.

La asignatura de religión católica es marginal con la nueva ley educativa y para colmo les quieren enseñar a nuestros hijos la cultura islámica porque me imagino que estos que están sentados en los despachos de poder no moverían ni una pestaña si nos invadieran los islamistas con sus persuasivas tácticas de comunicación.

Maquillaje en estado puro de un suflé vacío y pestilente. 

España va bien y todos los países se fijan en nosotros mientras los comedores sociales están abarrotados, Cáritas no para de atender a necesitados y hay personas esperando todas las noches a que los supermercados tiren al contenedor las bandejas con comida caducada para poder llevar algo de comer a sus casas.

Son demasiados hombres y mujeres caminando con la mirada vacía porque su vida, su bienestar, terminó cuando se quedaron el paro. Y si no me creen, observad a vuestro alrededor.

Se ha presentado la ridícula reforma de la ley del aborto del gobierno de Mariano Rajoy que es un ejercicio más del maquillaje al que nos tiene acostumbrado. Mantienen el aborto libre, el aborto como derecho, el aborto tal y como lo conocemos hoy en día aunque dan una leve pincelada para que las jóvenes de 16 años no puedan abortar sin consentimiento paterno.

Esta ley está siendo criticada por la izquierda así como los partidos que van de una cosa aunque tiene un perfil auténticamente socialdemócrata, las feministas del derecho a decidir, las Femen y sus ordinarias desnudeces, los artistas y actores del dinero público  y demás mamarracho como existen para ellos en este "país".

En cambio el Partido Popular y sus miembros han acogido esta "reformita" con júbilo pues se mantiene el espíritu gris turbio en el que se desenvuelven. Los "sorayos" están alegres porque su máximo referente está contenta, los marianistas también porque su líder puede mirar el horizonte y perderse en él porque al fin y a la postre han "cumplido" con lo que decía su programa electoral.

En el se decía que iban a reformar la ley del aborto y lo han hecho aunque haya supuesto el enésimo engaño a sus antiguos votantes al solo mover una coma.

En España se seguirá abortando porque Aído y Zapatero así lo impusieron y porque Mariano Rajoy, el nuevo Herodes, mantiene el 99% de lo tristemente aprobado en su día. España se seguirá cubriendo de sangre de tantos inocentes derramada gracias a un gobierno de auténticos mentirosos y cobardes que no son capaces ni de ser fieles a los principios que fundamentaron su partido. España seguirá instalada en la Cultura de la Muerte porque hay demasiados acomplejados sentados en las poltronas y creen que haciendo lo que han hecho y hacen van a ganar votos por un sector que nunca los votará. 

¿Y nos asombramos? 

No deberíamos sorprendernos cuando un asesino asqueroso, un auténtico hijo de puta que tuvo secuestrado como una rata a un valiente como Ortega Lara y asesinó a Guardia Civiles, que tenía sus manos y su alma manchadas de sangre inocente, al igual que la de tantos niños que han sido, están siendo y serán abortados, como Bolinaga ha muerto tranquilamente en libertad.

¡Ay, mi pobre España!

Jesús Rodríguez Arias

No hay comentarios:

Publicar un comentario