sábado, 7 de septiembre de 2019

LA VIDA ES UN JIRJOL





Pues no, la vida de esta family ardillera no está muy bien encaminada pues mi Ardi, aquel ser tan extraordinario que me comía la bellota mientras mirábamos absortos el lago en los ánsares perdían su normal compostura al ver tan linda pareja como hacíamos.

Pero Ardi, aconsejada por sus puñeteros padres, se me fue para siempre, se desposó con Oso Hormiguero, se divorció, y ahora vive de pecado en pecado pues el desarraigo es mucho ya que Ardillón no ha resultado ser su progenitor y  mi suegro querido, que ya no luce ricitos, se ha hecho una prueba de adn en el que ha quedado demostrado que no es padre de tan risueña criatura que por desamor de ha convertido en una despendolada.

Ardillona, ha recibido por burrofax una demanda judicial del que ella llama Sheriff ya que está poniendo el honor y el de su familia en serias dudas con sus insinuaciones constantes, que ya es majaretil fijación, de que mi suegro querido también fue su policía montada del Canadá que conociera cuando era púber y ella tenía pelos en el mimi.

Don Ardillón, después de dar más coletazos de los debidos, ha vuelto a reconducir su vida creando un negocio de venta de gurrupatos al por mayor y está teniendo mucho éxito en las Islas Feroe. Allí ha conocido a una bella damisela, indígena en todos los sentidos, que se llama A’ká Yo y que según parece es la empresaria de moda en lavativas ecológicas con las que ya lleva ganado más de mil millones de liedres que es la moneda oficial.

Ardicandidez, la eterna amiga de Gema, al ver tantos desplantes se quiere ir a un templo donde perderse y no hallarse. La vida de tan cándida peluda es muy dura pues nadie en verdad la quiere porque todavía cree en los magos del Peloponeso. El Templo que dirige la Hermana Sorry, es inglesa, le ha pedido como dote más de cien mil pero ella que es pobre como viento le va a llevar 15 tortillas de patatas que está haciendo con frenesí va y frenesí viene…

Lo de mi ex-cuñado Ardillesco es mucho peor porque de tantos desplantes de su ex-amada Encarna ya dice que no la ama, que no la desprecia porque siempre será un caballero, pero que le ha cogido inquina no vayamos a ser mal pensados…

El otro día lo vi paseando de la hija pequeña de la morsa Fina e incluso le tiró su capa en un charco para que tan voluminosa damisela pasara sin mancharse y ella, que ha sido educada en los prestigiosos colleges del profesor Rana, se mofó  en toda su cara diciéndole que si era carajote o qué…. Aun así la relación prosigue pues el otro día lo vi regalarle unos apetitosos pastelitos de boñigas de calamar que ella se zampó con bolsa de plástico ecológico incluida echando un flatín que hizo reipenar a tan gracioso caballero de hidalguía no reconocida. Según cuentan las malas lenguas, que son casi todas, nuestro Ardillesco no es feliz con la morsa de su novia y menos de su suegra y que está pensando en dejarlo pero que no se atreve todavía ya que el anterior novio, que tenía incluso  derecho a goce, le dio tal bofetón que estuvo a punto de desnucarlo y al día de hoy todavía usa collarín cuando va a miccionar.

Encarna, Encarna… ¿Dónde me ha metido tu indiferencia hacia mis nobles y caballerescos sentimientos?  Dice amargado con mucha amargura…

Ardigitón ha vuelto al redil familiar porque ha fracasado en su idea de hacerse artista ya que sus canciones no eran muy seguidas y sus rumbas rumberas eran poco bailables en los conciertos que daba en el día de la sordera nacional.

Ahora dice que va a trabajar de algo y mientras tanto lo puedes ver tomando unas chicuelitas en la taberna de GloriGlori que lleva el viejo Pirata Pato de Palo que fue cantante en más bautizos que funerales.

Y el único que está triunfando con diferencia es Ardillete Jirjol que ahora viene de su exitosa gira americana para empezar la europea. Cientos de miles llenan sus espectáculos y dicen que gana más que el de la mansión de Galapagar ese…

Jirjol, jirjol, aquí no pasa nada, ya pasó…

Mi family ya no lo es,
todos se han ido a la vez,
mi hermana Ardi se la deja meter,
y los demás que les den..

Jirjol, jirjol, aquí no pasa nada, ya pasó…

La cándida de mi hermana llora por las esquinas,
pues su amiga imaginaria atención no le ha prestado,
ahora quiere irse a retirarse pues con la soledad se ha casado,
y su “amiga” no para de fiestear en las playitas…

Jirjol, jirjol, aquí no pasa nada, ya pasó…

El que fuera prometido de mi Ardi,
llora como un descosido como un tontaina,
con la mujer que tiene que embelesa el alma,
que no se parece al “padre” ni en las pestaña…

Jirjol, jirjol, aquí no pasa nada, ya pasó…

El suegro querido ha hecho estragos,
corazones rotos por doquier ha dejado,
mi madre Ardillona tiene cara de ajo,
y dice que aquél policía era más alto que bajo..

Jirjol, jirjol, aquí no pasa nada, ya pasó…

Mi Ardillesco hermano de una mujer se enamoró,
se llamaba Encarna y un portazo le pegó,
Él no tiene ganas de nada y está tristón,
y la morsa de su nueva novia quiere sacarle de tó…

Jirjol, jirjol, aquí no pasa nada, ya pasó…

Que Ardigitón no triunfara ya se sabía,
sus canciones no las cantaba ni a su tía,
es soso, muy Ardillón, las palabras le caían,
y la música aparte de mala era una porquería.

Jirjol, jirjol, aquí no pasa nada, ya pasó…

Mi triunfo es tu triunfo y ahora nado en la abundancia,
tengo millones y millones y varios bancos con recámaras,
tengo piso en sensinati, en Miami y en Gandía,
en Galapagar tengo otro justo enfrente del colita.


Nado en la abundancia, en piscinas buenas,
todos quieren tocarme el pelo pero no tengo melenas,
canto y canto mucho, canto con voz nueva,
soy el triunfador de una familia sin gloria ni penas.

Si me tengo que identificar lo hago con el Sheriff,
que canta una barbaridad y todos los quieren,
luce pizpireto, luce peripuesto, tiene don de gente,
y más que lo miro, más parecido me tiene…

Jirjol, jirjo, aquí no pasa nada, ya pasó…

Y si yo fuese algo suyo, no me lo puedo ni creer,
le dejaría los 15 millones de leuros y dos casitas de cada tres,
lo haría con los ojos cerrados mi director-managé,
y sería para mí como un padre que nunca llegué a tener…

Jirjol, jirjo, aquí no pasa nada, ya pasó…
Y que se vayan a tomar por saco toas mis castas,
que para pedir son los primeros y después eres cloaca,
te critican en los medios, que si novio o novia me cata,
para seguir sacando dineros y vivir como ardillas viejas y malas.

Sheriff, ¿Quieres ser mi padre? Te lo pido por cariá,
mañana te adelanto unos milloncitos que te hagan recapacitar,
necesito un diresto-managé que me sepa mandar,
y que coma canapiés en vez de pringá..

Jirjol, jirjol, aquí no pasa nada, que aquí ya pasó…

Esta canción cuya autoría es de Ardillete Jirjol ha sido un rotundo éxito en las Islas Baleares, Costa Rica y Canadá y los ingresos, que son muchos, los ha entregado a la Fundación “Llevemos el Jirjol al Mundo Mundial” del que es presidente, y dueño, el propio Ardillete que gana un pastón y descuenta los impuestos e intereses…

Sheriff, si decides ser mi padre adoptivo, te pongo también de presidente, ven y acepta a este huerfanito de una familia tan repelente y te regalo un cubrericitos para que no se estropeen los que tienes…

Jirjol, jirjol, y es que al Sheriff lo voy queriendo mogollón…

Esto, personalmente, no sé vosotros, no sé como tomármelo pues este no quiere a los chupopteros de su familia y menos a nosotros que somos los agregados…

¡Ingrato, más que ingrato! Que si no es porque Encarna y Sheriff, que también jirjolean, no te conoce ni el gato…

Jesús Rodríguez Arias

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